Voy a darme un respiro

Todas las noches de tu ausencia
inventé tu cuerpo entre las sábanas.
Y un día te acercaste.
Desemboqué contigo, desde entonces,
como el río en el mar, juntando nuestras aguas,
y trémula, como gota de agua en una hoja,
me he sentido caer como la lluvia al despertar.

Pero voy a darme un respiro
y dejaré de pensarte por un tiempo.
Estoy cansada. Necesito navegar por otras aguas.
Respirar otros aires.
Pintar con tizas de colores lo que escribo
para ver de clarificar alguna idea.
Empezaré en este momento
aunque sea una hora intempestiva.
Porque se trata simplemente
de alejarte un poco de mi vida.

Déjame intentar darme un respiro
porque sino vivir se me va a poner
bastante cuesta arriba.

Aquella tarde en Madrid
aquella tarde de agua en grandes cantidades
vi llegar el otoño de repente
empañando de nubes aquel lago tan limpio
que llevamos dentro
y tú, sin enterarte, seguiste sonriendo.

Escrito por Musaraña

Benacazón 11.01.1991