Me cuesta tanto no amarte, que desisto
a Blanca Ramos
Me cuesta tanto no amarte, que desisto.
Tengo recuerdos tuyos desde antes de mi infancia.
Tu imagen, que me aguarda a diario
en cada pensamiento que me arrancas,
se me hace intolerable en presencia de los otros,
y en la ausencia, te tengo tan presente que me cansas.
Me cuesta tanto no amarte, que desisto.
Y como tú conoces bien esa flaqueza
te quedas quieto a la sombra del silencio
y esperas que amanezca la distancia
para recabar así los tenues resplandores de una llama
que sabes arderá por ti lejana y solitaria.
Me cuesta tanto no amarte, que desisto.
Y mientras la tarde calla, llega la noche y me habla,
y adquiere importancia el tacto,
la luz, la sombra, la almohada
y te apareces de nuevo y me acaricias la espalda
y cuando abro los ojos, el alba me da en la cara.
Y tanto me cuesta no amarte, que desisto.
escrito por Musaraña
Burgos 23.12.89
Me cuesta tanto no amarte, que desisto.
Tengo recuerdos tuyos desde antes de mi infancia.
Tu imagen, que me aguarda a diario
en cada pensamiento que me arrancas,
se me hace intolerable en presencia de los otros,
y en la ausencia, te tengo tan presente que me cansas.
Me cuesta tanto no amarte, que desisto.
Y como tú conoces bien esa flaqueza
te quedas quieto a la sombra del silencio
y esperas que amanezca la distancia
para recabar así los tenues resplandores de una llama
que sabes arderá por ti lejana y solitaria.
Me cuesta tanto no amarte, que desisto.
Y mientras la tarde calla, llega la noche y me habla,
y adquiere importancia el tacto,
la luz, la sombra, la almohada
y te apareces de nuevo y me acaricias la espalda
y cuando abro los ojos, el alba me da en la cara.
Y tanto me cuesta no amarte, que desisto.
escrito por Musaraña
Burgos 23.12.89
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