miércoles, 21 de marzo de 2007

Orientarse sin Brújula:

Podemos quedar aislados en la naturaleza y no disponer de mapa ni brújula, o encontrarnos en una zona donde el uso de la brújula sea mas perjudicial que otra cosa, por ejemplo en regiones polares o terrenos ricos en mineral de hierro.
Caso de hallarse a más de 60º de latitud en el hemisferio norte y si no se conoce la propia posición o se tiene la certeza absoluta de que siguiendo el curso de un río cercano se ha de llegar a un poblado, los Departamentos de Defensa de los Estados Unidos y el Canadá recomiendan encarecidamente a las personas extraviadas que no se muevan de donde están y esperen allí hasta recibir auxilio.
Son numerosos los organismos oficiales, de diversos países, que se mantienen al acecho de cualquier presencia extraña en el círculo polar, ya se trate de grupos de expedicionarios o víctimas de un accidente aéreo, y toda irregularidad o llamada de socorro da pie a la actuación inmediata de equipos de búsqueda y salvamento.
No obstante, en distintas circunstancias o en otras partes del mundo podrá ser aconsejable salir cuanto antes en busca de la civilización, en vez de esperar a que ésta venga a nosotros.
En tales casos es importante no "volverse a perder", lo que implica saber regresar al punto de partida si uno se aleja de él y no ponerse en marcha hasta conocer con exactitud adónde se va.


Distintos sistemas de Orientación:

1.- El reloj, instrumento de orientación

Un reloj ordinario sirve también para determinar aproximadamente el norte o Sur
geográficos. En la zona templada septentrional (sur), la esfera del reloj se coloca
de modo que la aguja de las horas apunte hacia el sol. La línea del sur pasa a
medio camino entre esa manecilla y las 12 en punto del reloj. En el horario de
verano, la 1 del reloj cuenta como las 12, cosa que debe recordarse al trazar la
línea imaginaria. En caso de duda sobre cuál de los dos extremos de la línea es el
norte, téngase presente que el sol queda al este por la mañana y al Oeste por la
tarde.
El reloj permite asimismo averiguar la dirección en la zona templada meridional (norte), pero el método es diferente. Las 12 del reloj apuntan ahora hacia el sol, y la línea trazada a mitad de camino entre las "12" y la aguja de las horas indica el norte. Lo que decíamos del horario de verano se aplica también aquí: la línea del norte se sitúa entonces entre la aguja de las horas y la "1" del reloj. Las zonas
templadas se extienden entre 23 l/2º y 66 1/20 de latitud en ambos hemisferios.

Este método no está exento de errores, especialmente en latitudes bajas, y puede
hacernos andar en circulo. Para evitarlo, improvísese un reloj de sol y háganse los
ajustes necesarios con el auténtico reloj, repitiendo la operación cada hora durante
tarde.

El reloj permite asimismo averiguar la dirección en la zona templada meridional
(norte), pero el método es diferente. Las 12 del reloj apuntan ahora hacia el sol, y la
línea trazada a mitad de camino entre las "12" y la aguja de las horas indica el
norte. Lo que decíamos del horario de verano se aplica también aquí: la línea del
norte se sitúa entonces entre la aguja de las horas y la "1" del reloj. Las zonas
templadas se extienden entre 23 l/2º y 66 1/20 de latitud en ambos hemisferios.

Este método no está exento de errores, especialmente en latitudes bajas, y puede
hacernos andar en circulo. Para evitarlo, improvísese un reloj de sol y háganse los
ajustes necesarios con el auténtico reloj, repitiendo la operación cada hora durante
la marcha.

2.- Método de la punta de la sombra.

a. Plántese en el suelo un palo o una rama desnuda, cuidando de hacerlo en un terreno lo bastante llano para que se proyecte una sombra bien visible. Márquese la línea formada por la sombra. Colóquese una piedra, una ramita u otra señal parecida en el lugar correspondiente a la punta de la sombra.
b. Espérese a que la punta de la sombra se mueva unos pocos centímetros.
Si el palo mide un metro, bastarán unos 15 minutos. Cuanto más largo sea,
más rápidamente se desplazará su sombra. Señálese la nueva posición de
la punta de la sombra por el mismo procedimiento de antes.
c. Trácese una línea entre las dos marcas para tener así una dirección
aproximada este-oeste. La primera punta indica siempre el oeste, y la segunda el este, a cualquier hora del día y en cualquier parte de la tierra.
d. Trazando una segunda línea perpendicular a la primera, se obtendrá la dirección aproximada norte-sur, con lo cual uno está ya prácticamente orientado y puede dirigirse adonde desee.

Inclinar el palo para lograr una sombra más conveniente por su tamaño o dirección no influye en la exactitud de este método. Así, el que camine por suelos en cuesta o con mucha vegetación no necesita perder un tiempo precioso buscando terrenos lisos.
Todo cuanto se requiere para señalar las dos puntas de sombra es un pequeño espacio aplanado no mayor que la palma de la mano.
El palo puede plantarse en cualquiera de sus bordes.
Tampoco es del todo indispensable utilizar un palo o una rama para esta operación; el mismo resultado se obtiene con cualquier objeto fijo (la base de una rama, un tallo, etc.), pues lo único que interesa marcar es el extremo de la sombra.

3.- Método de las sombras iguales para orientarse

Se trata de una variante más precisa del método de la punta de la sombra, pudiendo emplearse en latitudes inferiores a 660 y en cualquier época del año.
a. Plántese verticalmente en el suelo un palo o una rama, aprovechando un
espacio lo bastante llano para que la sombra proyectada, que debe medir al
menos 30 cm, se distinga con nitidez.
Márquese la punta de la sombra con una piedra, ramita, etc. Esto debe hacerse de 5 a 10 minutos antes de mediodía (hora solar).
b. Trácese una semicircunferencia utilizando la sombra como radio y la base
del palo como centro. Para este trazado puede servir una cuerda o un
cord6n de zapatos.
c. A medida que nos acercamos a las 12 del día, la sombra va haciéndose
más corta. Después de las 12, se alarga hasta cruzar el arco.
d. Trácese entre las dos marcas una línea recta, que será la línea este-oeste.
Aunque, como decíamos, esta versión del método de la punta de la sombra resulta más precisa que la primera, se halla sujeta a dos condiciones:
a. Debe realizarse hacia mediodía.
b. Para llevarla a cabo, el observador ha de vigilar la sombra y concluir la
tercera etapa en el momento exacto en que la punta de la sombra alcanza
el arco.

No hay comentarios: