miércoles, 31 de agosto de 2011

El Marica - Abeladro Castillo

After (Alberto Rodríguez 2009)

Dirección: Alberto Rodrígue.País: España. Año: 2009. Duración: 116 min. Género: Drama. Interpretación: Guillermo Toledo (Julio), Tristán Ulloa (Manuel), Blanca Romero (Ana), Jesús Carroza (Jesús), Raúl del Pozo (Pablo), Marta Solaz (Irene), Valeria Alonso (chica), Ricardo de Barreiro (Ramón), Maxi Iglesias (García), Álvaro Monje (Andy). Guión: Rafael Cobos; basado en un argumento de Rafael Cobos y Alberto Rodríguez. Producción: José Antonio Félez. Música: Julio de la Rosa. Fotografía: Alex Catalán. Montaje: José M. G. Moyano. Dirección artística: Pepe Domínguez. Vestuario: Fernando García

Si el objeto de la película es mostrar el vacío existencial que anida en personas que frisan los cuarenta años, y los cuales a pesar de sus posiciones acomodadas, satisfechas entiéndase el aspecto material, atesoran una serie de problemas de todo tipo, podemos decir que esta producción cumple con su objetivo.

Los protagonistas son los tres que vemos caminando por una calle iluminada a altas horas de la madrugada al comienzo del film, cebados por el alcohol, con una esbelta y guapa mujer bamboleada por dos hombres, a la sazón amigos de la susodicha.

La acción transcurre durante una noche de farra, en la cual tras casi una año sin verse los tres amigos se reúnen para exprimir las ubres de la noche, sin reparar en el consumo de toda clase de drogas, así como hacer uso y disfrute del sexo en diversas variantes, ya sea un trío, felaciones, o masturbaciones sobre mujeres ebrias o frente a la pantalla de un portátil.

Al tiempo que vemos como el trío va de discoteca en discoteca metiéndose de todo, se van añadiendo otras escenas anteriores en las que conocemos algo más de la vida de esas personas. Uno de ellos vive con su mujer y un hijo que le rehuye, quizá por su carácter violento, siendo su rol paterno un mero alfeñique. Otro, es responsable de personal, y lo vemos despidiendo gente en una empresa, y en materia sexual anda un tanto desnortado así que no ceja en su empeño de cepillarse a su amiga, la cual ávida de sensaciones nuevas, al tiempo que mantiene una relación con su novio, no desaprovecha la ocasión de hacerse un trío con dos yogurines (uno de ellos es Maxi Iglesias, quien no sabe salir en la pantalla grande y no enseñar su trasero) y dejarse sobar por sus amigos, sus dos mejores amigos.
Cada uno como se ve, tiene sus demonios interiores con quienes lidiar. Todo queda en suspenso porque la historia ni tiene comienzo ni final, así que lo que les pasará a cada uno de estos personajes es cosa suya. Lo que se nos ofrece es sólo un momento de sus vidas, un breve lapso de tiempo. Nada sabemos de qué circunstancias han propiciado esa situación, ni como les irá en el futuro.

Como decía al comienzo ese vacío existencial queda bien plasmado gracias al trabajo de dos actores solventes como Guillermo Toledo y Tristán Ulloa, y una Blanca Romero (nominada a los Goya por este papel, que borda su papel de esa mujer a quien su liberación sexual no le secunda la felicidad, sino la desdicha). Con buen ritmo, y una atractiva banda sonora, lo que nos queda es algo parecido a la versión adulta de Mentiras y Gordas, si bien eso sería en cuanto a edad porque su comportamiento dista mucho de algo parecido a la madurez entendida esta como responsabilidad, coherencia, referentes con los que actuar, equilibrio, etc. Aquí también abundan las drogas y el alcohol, sin embargo el sexo ya no es tan fluido como a los 20, sino que a los 40, todo se convierte en algo más sucio, como una cascada de semen sobre una mujer ebria o frente a una pantalla muda, en lugar de un polvazo en los baños de una discoteca, de cuerpos desbordados por la pasión. Ahora los miedos, las experiencias negativas, las paranoias, la vida vivida en definitiva hace que todo sea menos natural, viciado por la experimentación y enturbiado por unas drogas que extraen lo peor de cada uno.

Para artistas del jardín

Vía Muy Interesante

lunes, 29 de agosto de 2011

Niños pobres, pobres adultos

Vía Muy Interesante

Oia.Santorini

Niños jugando con agua

domingo, 28 de agosto de 2011

Mini Cangrejo

La Luna sobre Bangkok - Thailand

Generación del 98

Búscalos y encuéntralos

sábado, 27 de agosto de 2011

DE CÓMO VINO AL MUNDO LA ORACIÓN

De lirio en oración, de espuma herida
por el paso del alba silenciosa;
de carne sin pecado en la gozosa
contemplación del niño sorprendida;

de nieve que detiene su caída
sobre la paja que al Señor desposa;
de sangre en asunción junto a la rosa
del virginal regazo desprendida;

de mirar levantado hacia la altura
como una fuente con el agua helada
donde el gozo encontró recogimiento;

de manos que juntaron su hermosura
para calmar, en la extensión nevada,
su angustia al hombre y su abandono al viento.

Luis Rosales

Como cada mañana

Ahora sé
que estas calles nos han hecho solitarios
y nuestro corazón
tiene el pulso amarillo
de las maderas lentas de un tranvía.

Sobre su cuerpo viejo
andábamos despacio, de forma irregular,
con una simetría parecida a los árboles.

Era hermoso acudir
cada mañana
y respetar la cita con la hiedra
del muro,
los ropajes cansados de las casas estrechas
y de las calles sucias. Agradable
cruzar sobre algún puente,
detenerse lo exacto
para ver cómo el agua discute en las orillas.

En su jardín olimos
los primeros inviernos, su curso indefinido
por entre las palmeras.
Casi nadie pasaba,
sólo había
cuarenta sillas rojas
de los bares cerrados y alguna soledad
definitiva.

Durante muchos años,
durante tantos días que pasaron
el uno tras el otro,
el deber era un cierto paseo solitario,
la cita con un rumbo que sólo desviamos
para pisar las horas que caían,
los sueños que faltaban,
la superficie helada de los charcos,
para saltar los setos
o besamos las uñas moradas por el frío.
Y llegando a la puerta solíamos comprar
pequeños caramelos de nata o de violetas.

Entrábamos por fin para mezclamos
como cada mañana de la vida
con el paso cansado, los azulejos fríos
de un mundo hecho en latín
y números romanos.

Ahora sé
que en aquella ciudad deshabitada
la gente andaba triste,
con una soledad definitiva
llena de abrigos largos y paraguas.

Luis García Montero

UNOS CUERPOS SON COMO FLORES

Unos cuerpos son como flores,
otros como puñales,
otros como cintas de agua;
pero todos, temprano o tarde,
serán quemaduras que en otro cuerpo se agranden,
convirtiendo por virtud del fuego a una piedra en un
hombre.

Pero el hombre se agita en todas direcciones,
sueña con libertades, compite con el viento,
hasta que un día la quemadura se borra,
volviendo a ser piedra en el camino de nadie.

Yo, que no soy piedra, sino camino
que cruzan al pasar los pies desnudos,
muero de amor por todos ellos;
les doy mi cuerpo para que lo pisen,
aunque les lleve a una ambición o a una nube,
sin que ninguno comprenda
que ambiciones o nubes
no valen un amor que se entrega.

Luis Cernuda

viernes, 26 de agosto de 2011

No sentiste, crisálida aun el peso del aire...

No sentiste crisálida aun el peso del aire
en tu cuerpo aun sin límites no hubo deseos alas
en tu cuerpo aun sin límites ciega luz no sentiste
oh diamante aun intacto el peso del aire.

A lo lejos azules las montañas qué esperan
Por dónde van las águilas. Cruzan sombras la nieve
Canta el viento en los álamos los arroyos susurran
Las luciérnagas brillan en las noches serenas
Olor denso a resina crepitan las hogueras
Con antorchas acosan y dan muerte a los lobos
En combate de luces derrotada la nieve
Nada turba el jazmín al aire florecido

Y sus rubias cabezas sobre la hierba húmeda

Son sus ojos azules un volcán apagado
En el viento naufragan sus cabellos de oro
De sus muslos inmóviles tanta luz que deserta

Cómo duele en la sombra desear cuerpos muertos.

La mies amarillea caen a tierra los frutos
Ellos vuelven cansados y no hay luz en sus ojos
Pero los huesos brillan y dividen la noche
Hueste antigua que danza alrededor del fuego
La hora es del regreso y no hay luz en sus ojos
Salpicaduras al borde del camino cabellos aplastados
La hora es del regreso tened cuidado aguardan.

Las luciérnagas brillan en las noches serenas

Canta el viento en los huesos como en álamos secos
entra en el pecho silba y ríe en las mandíbulas
entre las ramas flota de un ruiseñor el canto
y como un río el viento acaricia sus cuencas

A lo lejos azules las montañas qué esperan
Una antorcha en la mano de mármol una llama de gas
bajo el arco vacila
Y sus nombres apenas quiebran la luz el aire

Sepultará la tierra tan débiles cenizas
volarán sobre ellas golondrinas y cuervos
sobre ellas rebaños pasarán hacia el Sur
se alzará sobre ellas el sueño de pastores
y desnuda la tierra morirá con la nieve
La hora es del regreso en sus labios asoman
olvidadas canciones rostros contra el poniente

Qué voló de sus labios al cielo y sus ojos azules
qué lava derramaron en qué ocultas laderas
En sus ojos azules se posaba la escarcha
antaño fue el deseo siempre arrancada venda
oh qué fuego voló de sus labios al cielo
aquellos labios rojos que otros nunca olvidaron.

Pero el viento deshace las últimas nieblas
Otros creen que es el frío en las manos caídas
Olvidan que la llama tan sólo se apaga en sus ojos
que después no es el frío, es aun menos que el frío

Leopoldo María Panero

OH, ESTE DOLOR

Oh, este dolor,
este dolor de no tener ya lágrimas;
este dolor
de no tener ya llanto
para regar el polvo.
¡Oh, este llanto de España,
que ya no es más que arruga y sequedad...
mueca,
enjuta congoja de la tierra,
bajo un cielo sin lluvias,
hipo de cigüeñaI
sobre un pozo vacío,
mecanismo, sin lágrimas, del llanto!
¡Oh, esta mueca española,
esta mueca dramática y grotesca!

Llanto seco del polvo
y por el polvo...
por el polvo de todas las cosas acabadas de España
por el polvo de todos los muertos
y de todas las ruinas de España...
por el polvo de una casta
perdida ya en la Historia para siempre!

Llanto seco del polvo
y por el polvo. Por el polvo
de una casa sin muros,
de una tribu sin sangre,
de unas cuencas sin lágrimas,
de unos surcos sin agua...
Llanto seco del polvo
por el polvo que no se juntará ya más,
ni para construir un adobe
ni para levantar una esperanza.
¡Oh!, polvo amarillo y maldito
que nos trajo el rencor y el orgullo
de siglos
y siglos
y siglos...
Porque este polvo no es de hoy,
ni nos vino de fuera:
somos todos desierto y africanos.

.................................................

Tierra arenosa sin riego,
carne estrujada sin llanto,
polvo rebelde de rocas renCOrosai
y lavas enemigas,
átomos amarillos y estériles
del yermo,
aristas vengativas,
arenal de la envidia. ..
esperad ahi secos y olvidados
hasta que se desborde el mar.

León Felipe

Sin nombre en el olvido

En las afueras de una ciudad,
la sombra de un hombre se ve divagar
por los caminos del tren...
Quizás su anden este vacío,
tal vez nadie lo espere,
¿alguien lo conoció?,
¿lo echaran de menos?

Encontraron un cuerpo...
más bien un moustro o fantasma,
sin identidad,sin vida,
su rostro un puzzle deformado,
su cuerpo un laberinto extraño,
desaparecido,sin señal en este mundo,
no nació,no murió...
desconocido para la humanidad,
nadie nunca supo de él,
quizás ni sabia quien era...

Entre las vías de un tren,
vió la luz y cerró los ojos,
no se retiró,solo se dejo ir,
no se suicido pues no existia,
seguramente hoy no lo recuerdan,
por ello,en su honor, se escriben
historias de un hombre sin nombre,
de casi un fantasma sin destino,
de un caminante sin rumbo,
de un alma perdida que vagaba,
hasta que le venció la desesperación,
hasta el instante en el que lo atropello la muerte...

Un ser sin nombre en el olvido quedó,
en medio de la negra ciudad,
nadie lo recordará...Ojala ahora descanses en paz...

Laura Fuentes Vega
Publicado por Poeta de Luna

jueves, 25 de agosto de 2011

EL COCINERO FIEL I - Tortilla de patata (a mi manera)

Ghost Scare Gay Babysitter

Dos Lobos

Una mañana, un viejo Tuxpeño le contó a su nieto acerca de una batalla que ocurre en el interior de las personas. El dijo, "Hijo mío, la batalla es entre dos lobos dentro de todos nosotros. "Uno es Malvado - Es ira, envidia, celos, tristeza, pesar, avaricia, arrogancia, autocompasión, culpa, resentimiento, inferioridad, mentiras, falso orgullo, superioridad y ego.. "El otro es Bueno - Es alegría, paz, amor, esperanza, serenidad, humildad, bondad, benevolencia, empatía, generosidad, verdad, compasión y fe." El nieto lo meditó por un minuto y luego preguntó a su abuelo: “¿Qué lobo gana?”
El viejo Cherokee respondió,"Aquél al que tú alimentes."

miércoles, 24 de agosto de 2011

martes, 23 de agosto de 2011

domingo, 21 de agosto de 2011

Soufflés que no bajan

Cocina Ligera

Flan de Crema de Manzana y Yogur

Cocina Ligera

Costillas con Albaricoques

Cocina Ligera

sábado, 20 de agosto de 2011

Acelgas

Cocina Sana

Lasaña Veraniega

Cocina Ligera

Sardinas con queso y salsa dulce

Cocina Ligera

viernes, 19 de agosto de 2011

Plaza Mayor de Salamanca

Presos de la Megalomanía

Vía Muy Interesante

Plughole on river Derwent

jueves, 18 de agosto de 2011

La explicación

Pollitos sin madre

Prince of Persia - Las arenas del tiempo

Prince of persia; las arenas del tiempoTítulo original: Prince of Persia: The Sands of Time. Dirección: Mike Newell.País: USA. Año: 2010. Duración: 117 min.Género: Acción, aventuras, fantástico, romance. Interpretación: Jake Gyllenhaal (Dastan), Gemma Arterton (Tamina), Alfred Molina (jeque Amar), Ben Kingsley (Nizam), Steve Toussaint (Seso), Toby Kebbell (Garsiv), Richard Coyle (Tus), Ronald Pickup (rey Sharaman), Reece Ritchie (Bis).Guión: Doug Miro, Carlo Bernard y Boaz Yakin; basado en un argumento de Jordan Mechner sobre la saga de vídeojuegos “Prince of Persia”.Producción: Jerry Bruckheimer. Música: Harry Gregson-Williams. Fotografía: John Seale.Montaje: Martin Walsh, Mick Audsley y Michael Kahn. Diseño de producción: Wolf Kroeger. Vestuario: Penny Rose

Del productor de C.S.I’, ‘Sin rastro’ y ‘Caso abierto’, entre otras, Jerry Bruckheimer, nos llega ahora esta adaptación del exitoso videjouego.
Hay detalles positivos en la cinta, como el ritmo trepidante, que deja sin resuello al respetable, donde el protagonista, es Dastan uno de los tres hijos del Rey (no legítimo dado que fue arrancado de la calle y amamantado bajo el manto imperial) príncipe de Persia, con quienes mantiene un tiro y afloja pues todos anhelan el poder de mando, candidato a formar parte de las filas de El circo del sol, capaz de hacer toda clase de acrobacias circenses, saltando de tejado en tejado, volando sin capa, haciendo movimientos tipo Matrix, Tigre o Dragón o Aguila Roja. En su desarrollo hay también secuencias que parecen sacadas de La Momia, de Indiana Jones; en resumen, una fritanguilla de mil producciones vistas anteriormente. Comienza la historia con la invasión de una ciudad, a la que se le acusa de forjar armas que venderán a los enemigos del Imperio (¿armas de destrucción de masiva inexistentes?. Algo de eso sabemos)

Aperecen en escena un batiburrillo de personajes de nulo calado, donde lo que prima es la acción pura y dura, el movimiento constante, todo ello rodado con mucho brío, donde desgraciadamente los protagonistas son carnaza para una historia que apenas los necesita para darle forma humana (es en películas como la presenta, donde uno se plantea si no obtendríamos los mismos resultados recurriendo a creaciones digitales, dado que la esencia humana no brilla por ninguna parte).
Sonrojantes son los diálogos que Dastan mantiene con la bella princesa Tamina, empleando un lenguaje más propio de cualquier comedia del siglo XXI, que de la época en la que transcurre la acción (”lo siento, pero no eres mi tipo”..y cositas por el estilo). Es lo que tiene el cine moderno, que a una actriz le ponen un vestido con brocados de oro y un velo, y ya quieren que nos la figuremos como una princesa de la época del esplendor del imperio Persa, cuando una vez que abre la boca, ya resulta una caricatura, increíble de hacernos conocer su condición y circunstancia. No es que uno busque el rigor histórico en una película como esta, pero hay detalles que se pueden cuidar un poco, a fin de que la historia tenga algo de más de consistencia, porque más allá de la acción trepidante, de una meritoria recreación infográfica de las ciudades Persas y unos bellos paisajes de dunas regadas por el oro solar, no hay nada que quede para el recuerdo, ya que esta película se olvida al mismo tiempo que se ve.

!Qué pelos tiene!. Fue uno de los comentarios que mas escuché entre las butacas, referidas a ese antaño “cowboy gay” que ahora, bien musculado, chocolateada zona abdominal, y pelo estropajoso, se nos presenta como el Joven Príncipe de Persia, al que da vida el “versátil”, Jake Gyllenhaal. Su amada, la princesa Tamina es la actriz británica Gemma Arterton, la cual tiene en cartelera Furia de Titanes y que se dio a conocer tras aparecer en Quantum of Solace, la última película de Bond hasta el momento, donde era la sensual pelirroja que se encamaba con el superagente. A pesar de que aquí su interpretación es tan mediocre como la del resto del elenco, su belleza y voluptuosidad es palpable y habrá que tenerla muy en cuenta.
Otro actor que se apunta a un bombardero es Ben Kingsley capaz de ofrecer brillantes interpretaciones en películas de culto, con otras actuaciones en películas palomiteras (La última legion, Bloodrayne), donde por lo general siempre hace de malo. A pesar de todo es tan buen actor que siempre está bien en su papel. Mención aparte para Alfred Molina, que parece sacado de la franquicia Piratas del Caribe, para componer un simpático personaje, guasón y chocarrero, en consonancia con el espíritu del film.

por Popeye Doyle

martes, 16 de agosto de 2011

La Araña

Entre las hojas de laurel, marchitas,
de la corona vieja,
que en lo alto de mi lecho suspendida,
un triunfo no alcanzado me recuerda,
una araña ha formado
su lóbrega vivienda
con hilos tembladores
más blancos que la seda,
donde aguarda a las moscas
haciendo centinela
a las moscas incautas
que allí prisión encuentran,
y que la araña chupa
con ansiedad suprema.

He querido matarla:
Mas... ¡imposible! Al verla
con sus patas peludas
y su cabeza negra,
la compasión invade
mi corazón, y aquella
criatura vil, entonces,
como si comprendiera
mi pensamiento, avanza
sin temor, se me acerca
como queriendo darme
las gracias, y se aleja .
después, a su escondite
desde el cual me contempla.

Bien sabe que la odio
por lo horrible y perversa;
y que me alegraría
si la encontrara muerta;
mas ya de mí no huye,
ni ante mis ojos tiembla;
un leal enemigo
quizás me juzga, y piensa
al ver que la ventaja
es mía, por la fuerza,
¡que no extinguiré nunca
su mísera existencia!
En los días amargos
en que gimo, y las quejas
de mis labios se escapan
en forma de blasfemias,
alzo los tristes ojos .
a mi corona Vieja,
y encuentro allí la araña,
la misma araña fea
con sus patas peludas
Y su cabeza negra,
¡como oyendo las frases
que en mi boca aletean!

En las noches sombrías
cuando todas mis penas
como negros vampiros
sobre mi lecho vuelan,
cuando el insomnio pinta
las moradas ojeras,
y las rojizas manchas
en mi faz macilenta,
me parece que baja
la araña de su celda,
y camina y camina...
y camina sin tregua
por mi semblante mustio
hasta que el alba llega.
¿Es compasiva? ¿Es mala?
¿Indiferente? Vela
mi sueño, y, cuando escribo,
silenciosa me observa.
¿Me compadece acaso?
¿De mi dolor se alegra?
¡Dime quién eres, monstruo!
¿En tu cuerpo se alberga
un espíritu? Dime:
¿Es el alma de aquella
mujer que me persigue,
todavía, aunque muerta?
¿La que mató mi dicha
y me inundó en tristeza?

Dime: ¿Acaso dejaste
la vibradora selva,
donde enredar solías,
tus plateadas hebras,
en las obscuras ramas
de las frondosas ceibas,
por venir a mi alcoba,
en el misterio envuelta,
como una envidia muda,
como una viva mueca?
¡Te hablo y tú nada dices,
te hablo y no me contestas!
¡Aparta, monstruo, huye
otra vez, a tu celda!

Quizás mañana mismo,
cuando en mi lecho muera,
cuando la ardiente sangre
se cuaje entre mis venas
y mis ojos se enturbien,
tú, alimaña siniestra,
bajarás silenciosa
y en mi obscura melena
formarás otro asilo,
formarás otra tela,
sólo por perseguirme
¡hasta en la misma huesa!

¡Qué importa!... nos odiamos,
pero escucha: no temas,
no temas por tu vida,
¡es toda tuya, entera!
¡Jamás romperé el hilo
de tu muda existencia!
Sigue viviendo, sigue,
pero... ¡oculta en tu cueva!
¡No salgas! ¡No me mires!
No escuches más mis quejas,
ni me muestres tus patas,
¡ni tu cabeza negra!...
Sigue viviendo sigue,
inmunda compañera,
entre las hojas de laurel marchitas
de la corona vieja,
que en lo alto de mi lecho suspendida
¡un triunfo, no alcanzado, me recuerda!

Julio Flores

NOCTURNO

Tengo esta noche las manos negras, el corazón sudado
como después de luchar hasta el olvido con los ciempiés del humo.
Todo ha quedado allá, las botellas, el barco,
no sé si me querían, y si esperaban verme.
En el diario tirado sobre la cama dice encuentros diplomáticos,
una sangría exploratoria lo batió alegremente en cuatro sets.
Un bosque altísimo rodea esta casa en el centro de la ciudad,
yo sé, siento que un ciego está muriéndose en las cercanías.
Mi mujer sube y baja una pequeña escalera
como un capitán de navío que desconfía de las estrellas.
Hay una taza de leche, papeles, las once de la noche.
Afuera parece como si multitudes de caballos se acercaran
a la ventana que tengo a mi espalda.

JULIO CORTAZAR

Poema A Edith Piaf de Julia Uceda

Te han condenado.
Una oración,
como limosna insuficiente,
ha caído
sobre la tapa de tu féretro.
Te han condenado, Edith,
por no querer ser
la excepción que confirma
la regla. Porque
querías,
tú, gorrión
de la calle, ser
la regla. Porque
intentabas salirte de la calle.
Te han condenado como
si Dios no fuese amor. El dedo
ejemplar
-una uña sucia, como
si lo viera- se alzó
sobre tu frente
y mostró al mundo
que sólo esa limosna- por sí acaso…-
merecías.

De nuevo a la intemperie.
Esta vez ” a la calle”
te han dicho.
A la calle amarilla
de los muertos, sin Senas,
sin flores, sin guitarras.

Pero tú, Edith, sonreirás.
Tuviste ya tu infierno
al borde de la cuna: sabes
lo que un niño criado con alcohol.
Edith, mystère Piaf, rezabas
no al morir, al cantar;
y sin saber por qué,
por quién acaso. Ahora
es cuando cantas en la inmensa calle
de Dios, alegremente,
Edith, mystére Piaf.

Julia Uceda

lunes, 15 de agosto de 2011

LO QUE PASA

Yo te entregué mi sangre, mis sonidos,
mis manos, mi cabeza,
y lo que es más, mi soledad, la gran señora,
como un día de mayo dulcísimo de otoño,
y lo que es más aún, todo mi olvido
para que lo deshagas y dures en la noche,
en la tormenta, en la desgracia,
y más aún, te di mi muerte,
veré subir tu rostro entre el oleaje de las sombras,
y aún no puedo abarcarte, sigues creciendo
como un fuego,
y me destruyes, me construyes, eres oscura como la luz.

Juan Gelman

PENSAMIENTO DE AMOR

Dejé un instante de pensarte. Había
sucedido algo en ti cuando volviste.
Venías más nostálgico, más triste,
seco tu sol que iluminó mi día.

Alguien -sé quién- que yo no conocía,
alguien que calza sueños de oro, y viste
almas dolientes, te pensó. Caíste
al pozo donde muere la alegría.

¿Por qué fuiste pensado, malherido,
pensamiento de amor? ¿Cómo han podido
pasarte el corazón de parte a parte?

¿Por qué volviste a mí, sufriendo, a herirme?
¿No recuerdas que tengo que ser firme?
¿Es que no ves que tengo que matarte?

De "Cuanto sé de mí" 1957
José Hierro