una canción, un labio;
el mar es un amante,
fiel respuesta al deseo.
Es como un ruiseñor,
y sus aguas son plumas,
impulsos que levantan
a las frías estrellas.
Sus caricias son sueños,
entreabren la muerte,
son lunas accesibles,
son la vida más alta.
Sobre espaldas oscuras
las olas van gozando.
Jorge Guillén
Bello bello, así es el mar un enorme olvido...
ResponderEliminarOjala visites mi sitio...ke estes muy bien.
=)